Mi vida suele llevar una regularidad casi perfecta(puesto laboral- trabajo en casa- dormir) y en los fines de semana (trabajo en casa – dormir), aderezada por algunas reuniones, participaciones en jornadas-congresos y viajes para participar en algún evento. Aunque a veces es algo monótona, siempre me permite conocer a mucha gente nueva, aprender de muchos, sentirme orgulloso por participar en esta sociedad,… y lo más importante sentirme vivo y útil. Lo importante es que no sé porque extraña razón, este fin de semana me he permitido el lujo de tomar unas mini-vacaciones, por supuesto en compañía de unas/os amigos, a ver cual mejor. Así, y sin planearlo, he podido y sin salir de la provincia asistir a varios eventos culturales, otros recreativos y otros de relax. A nivel espectáculos, recomiendo sin lugar a dudas los de las noches del viernes y el domingo, y bajo ningún concepto (repito ningún concepto lo que hice el sábado).
El viernes tuve la suerte una vez más de poder escuchar/compartir sentimientos a flor de piel con los cantautores Patricia Fernandez, Jose Antonio Delgado y Alfonso Moreno como siempre una experiencia que recomiendo a todos; siempre que puedo, me encanta poder llevar a nuevos amigos/as (sobre todo amigas) para compartir esas emociones.
El sábado, un día también cargado de experiencias, actividades que se vieron totalmente ensombrecidas cuando se nos ocurrió ir al cine: «Dios, que película más mala». Expresión que no era mía (aquello de ser agnóstico obliga) sino de todos los espectadores que constantemente se movían, levantaban,…. y por supuesto nosotros no hacíamos menos. Gracias que los «ronquidos» de Toni me hacían mantener la atención en otros menesteres. Creo que jamás había habido tanta unanimidad en una sala de cine, pues.. aunque el tema sugería mucho (Un nuevo mundo), ni la fotografía, ni el guión, ni los personajes, ni siquiera la banda sonora (simplemente aterradora) hacían mereciera la pena perder el tiempo allí. Desde luego, si voy al cine normalmente no es por la película en sí, sino por la compañía, y en esta ocasión merecía mucho, mucho, mucho la pena. Menos mal que tras la salida del cine, aunque muy cortito (o eso se me hizo a mí, habría que preguntar a los/as acompañantes) pude tener la oportunidad de compartir un buen rato, y no sólo de la exclusiva crítica a la película.
Para el domingo el plato fuerte, la obra «Los 7 pecados capitales», de la joven y guapa Irene,una producción de flamenco, llena de contenido, una buena puesta en escena y por supuesto la suerte de encontrarme con muchos amigos y compañeros, no por algo, casi todos los miembros de Iniciativa Focus de la provincia, e incluso algunos venidos de otra, tuvimos allí nuestro punto de encuentro.

En este día...

Categorías: Personal

Ramón

Apasionado del Conocimiento Libre y de las personas. Autor de Software Libre y Comunicación

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